Thursday 28.03.2024 | Actualizado 11:08 (hace 1962 días)
Con el crecimiento desmesurado de los conjuntos folklóricos, que llegan a medio millar de personas e incluso a más, contando las cuatro o más bandas de músicos que amenizan, las arterias de Puno prácticamente colapsaron y los danzarines, en vez de bailar, solamente se contentaron con desfilar, peor aún cuando tienen los trajes de morenos, wacawaca y especiales, por lo que definitivamente se tendría que evaluar la posibilidad de cambiar a una ruta perenne, donde por uno o dos días la imagen sagrada de la patrona puneña pueda ser trasladada y de esta manera no perjudicar a los conjuntos que en la parada se juegan el cuarenta por ciento del puntaje total.
Pasada las festividades en honor a la madre celestial de los puneños, las entidades que resguardan este hito folklórico tendrán que ponerse a evaluar los aspectos positivos y negativos de la presente festividad y, sin mediar intereses mezquinos y ladinos, de una vez por todas elegir la mejor opción, porque lejos de unificar criterios parece que cada organización habla un idioma distinto, semejando a la torre de babel, donde los más osados sacan la mejor forma de beneficiarse con la devoción de los danzarines, porque ellos son los que sacrifican sus ingresos mensuales para agradecer danzando a la sagrada imagen de la Candelaria.
Para muchos allegados a la iglesia católica, el problema radica en que el señor obispo no autorizaría para que la Virgen Maria de la Candelaria sea trasladada por unas horas a un local especialmente diseñado y construido, pero si las autoridades locales, regionales y organizaciones sociales presentan un buen proyecto que no perjudique a los intereses de los diferentes públicos, seguro que la autoridad eclesial no se pondrá intolerante e inclusive podría apoyar la veneración. Por ello es imprescindible que desde ya se fomente la creación de un organismo autónomo exclusivamente para hacer los proyecto de inversión de una avenida del folklore, con todas las bondades que esta debería tener, en provecho del fomento de la cultura y no ser parte de oscuros intereses que lindan con el delito.
¿Está usted de acuerdo con el proyecto de remodelación de la Plaza de Armas de Puno?