Los Andes

Salud. Desde este medio de comunicación, los anchanchos les mandamos un fraternal saludo a nuestros amigos locutores por su día. Lo malo es que nos informaron que algunos se excedieron en tomarse unas chilindrinas, aprovechando el feriado. ¡Tienen que cuidar su gargantita, compañeros, pues es su herramienta de trabajo!

Chelero I. El Chinchilico que soñó y jugó con la ilusión de un pueblo, no encontró otra alternativa que chupar y comportarse como un mocoso en la Festividad Virgen de la Concepción de Juli. Que se comporte así no es novedad, pero que se haya excedido en consumir alcohol porque su equipo da pena en la final de la Copa Perú, eso sí es preocupante. ¡No, pues!

Chelero II. El también alcalde escolar de la pequeña Roma del Sur, ayer se puso sus cajas de chelas y en plena plaza de armas se puso a bailar todas las danzas que participaban de la parada en homenaje a la mamita. Solo le faltaba mear en plena plaza, buitrear y dormirse. ¡Se notó que le afectó la eliminación del Trinacional! ¡Decepcionante!

Conchudos. Los delincuentes ahora roban a plena luz del día y no les importa ser observados. Ayer un conductor sufrió el robo de la memoria de su camioneta en pleno centro de la ciudad. Parece que el estado de emergencia es un chiste, solo que no causa risas. Ya pues policías, pónganse pilas, que les están viendo la cara. ¿O siempre fueron así?

Desubicado. El sonsejero Mochila se ha olvidado de cumplir sus obligaciones. Ya no quiere fiscalizar nada a nadie, mucho menos a la esposa del Juancho; ahora dice que sus colegas miembros de la comisión nunca lo notificaron, hasta se olvidó de que los eligieron en una sesión de consejo. ¡Mejor porque no dices que no puedes investigar a tu jefa!