Los Andes

Cuando asumió el cargo de presidente de la Corte Superior de Justicia de Puno (CSJP), en enero de 2015, Hernán Layme Yépez dijo que el eje fundamental de su gestión sería el “acceso a la justicia� por parte de las poblaciones vulnerables y necesitadas. Al día de hoy, podría decirse que lo está logrando.

En efecto, su labor ha sido muy sacrificada y loable en este sentido; así, es natural verlo en cuanto congreso sobre Justicia Intercultural Comunitaria se organiza en la región Puno, apoyando y brindando conferencias que, decididamente, ayudan a los pobladores de zonas rurales (y también de zonas urbanas) a comprender sus potestades.

El doctor Hernán Layme Yépez, con ello, demuestra que no es una autoridad más que solo cumple sus funciones, evitando los conflictos, sino que es un profesional que está decidido a encarnar esa justicia que muchos necesitados piden.

Y es que, nacido en Juliaca en 1966, él vivió en carne propia la exclusión y las barreras idiomáticas que impone una sociedad como la nuestra (una multicultural). “Aprendí a leer en el campo, caminaba horas para llegar a mi escuela, en Huijitapa; usé las ojotas, el chullo y el poncho. Fue traumático aprender a hablar el castellano. La profesora no me entendía, ni mis compañeros�, le confesó a este matutino hace ya tiempo.

A propósito de ello, es menester señalar que Layme Yépez realizó sus estudios primarios en la escuela 1126, San Juan Bosco, de Juliaca; y que los secundarios los cursó en la Gran Unidad José Antonio Encinas, de la misma ciudad.

Asimismo, que tras ello se trasladó hasta la ciudad del Cusco, donde se profesionalizó como abogado en la Universidad Nacional San Antonio Abad del Cusco (UNSAAC), y que antes de volver a Puno se desempeñó como Juez Superior Titular de la Corte Superior de Justicia de Ica.

Con estos pergaminos, además de su difícil pasado, es normal que el actual presidente de la CSJP sea un reconocido expositor nacional sobre temas de justicia intercultural, habiendo participado en diversos eventos, invitado por la Oficina Nacional de Justicia de Paz y Justicia Indígena (ONAJUP) del Consejo Ejecutivo del Poder Judicial y otros organismos.

Sin duda alguna, se trata de un profesional a carta cabal que, día tras día, demuestra sus capacidades y su compromiso con el desarrollo de la región Puno. Algo que, indefectiblemente, llena de orgullo a sus padres: Santos Layme Peñarrieta (Q.E.P.D.) y de Nicolaza Yépez Estrada.