Luego del concurso de danzas autóctonas, realizado en el estadio Enrique torres Belón, una gran cantidad de basura acumulada en los graderíos provocó malestar en los deportistas.
Tapers, bolsas, platos, latas de cerveza y otros productos desechables fueron dejados sin ningún tipo de cuidado, mellando una vez más la imagen de la ciudad.
Del mismo modo, los deportistas que se congregan en el recinto deportivo para entrenarse, tuvieron que hacerlo en medio de los desechos, siendo un potencial riesgo para su salud.