Columnista: Mayhc Vizcarra
Una de las figuras más sobresalientes en el conflicto judicial que persigue a Walter Aduviri, es el vicegobernador Agustín Luque Chaiña. Este personaje fue y es el aún llamado a dirigir la región por lo menos en estos 15 días de ausencia del gobernador.
Sin embargo, Luque Chaiña no ha tenido el suficiente valor, fortaleza, menos valentía para tomar las riendas de la región. Por lo que sabemos, estos 15 días serán decisivos para evaluar sus próximas acciones.
En estos primeros días de ausencia del gobernador, es evidente el vacío de poder que existe en el Gobierno Regional. Dirigentes, funcionarios, autoridades de la región, a diario visitan la sede central de la entidad, pero no hay una autoridad regional que atienda los pedidos de la población usuaria.
Ante este vacío de poder, lamentablemente Agustín Luque prefiere silbar de costado y mirando a los techos, en una actitud timorata y de sumisión frente a la posible reacción negativa de Walter Aduviri.
En la víspera se esperaba conocer el fallo del colegiado sobre la culpabilidad o la inocencia de Walter Aduviri; sin embargo, en la audiencia solo se escucharon los alegatos finales, dejando para este martes 14 de agosto la lectura de la sentencia, lo que definirá además el futuro de toda la región.
Conocido este fallo, se sabrá el actuar real del vicegobernador, considerando que sus acciones hasta el día de hoy han sido siempre cautelosas, prudentes y hasta silenciosas, denotando la ausencia de poder en el Gobierno Regional.
En caso que el fallo sea desfavorable para Aduviri, entonces tendremos a un Luque desenfrenado y con todas las ganas de tomar el poder de la región, y sin perdón de nadie asumirá las riendas de una entidad que entra por 15 días con un vacío de poder.
En el otro escenario, si es que Aduviri es absuelto, la historia será de reencuentro y de reforzar los lazos de unión y fidelidad entre ambos.