Columnista: Mayhc Vizcarra
Si alguna vez usted creyó que este nuevo Consejo Regional podía ser superior o mejor que los anteriores, pues déjeme decirle que se equivocó, porque lamentablemente este pleno se ha reducido a la participación, opinión y debate de tres de sus integrantes.
En la composición de este Consejo Regional, el resto de autoridades se ha convertido en simple relleno, bulto, cual si fueran -en lenguaje bíblico- corderitos que siguen a los mesías personalizados en dos consejeros que han sabido plantear sus posiciones con argumentos.
De los tres actores, uno es el presidente del Consejo, José Luis Borda, quien por su cargo ha tenido algún grado de participación rescatable, aunque solamente responda a las funciones que se le encomiendan (debe dirigir los debates y temas agendados). Pese a ello, no ha tenido gran relevancia.
El segundo actor es Jorge Zúñiga, quien lidera el grupo de amargados consejeros que no tenían horizonte hasta conocerlo. Zúñiga ha sabido canalizar esa inestabilidad emocional, los ha acogido y les ha dado una consigna.
La frustración de los exoficialistas, en efecto, fue muy bien canalizada por el consejero por Puno, proveniente de las filas de Poder Andino. Zúñiga supo cobijarlos, darles abrigo y sombra; sin él, esos consejeros seguirían divagando sin rumbo ni destino.
El tercer actor es el oficialista Germán Alejo, quien ha mantenido sus principios y ha fortalecido al ahora reducido grupo de aduviristas, los cuales continúan defendiendo al aún gobernador regional a capa y espada.
Alejo ha sabido convencer y conservar a los 5 consejeros oficialistas restantes, los cuales se inmolaron ayer en defensa de Aduviri ante el pleno del Consejo Regional. Lo curioso es que Alejo es invitado al movimiento… Pese a ello, es uno de los principales defensores del encarcelado Gobernador Regional.
En este escenario, todas las decisiones en el pleno están basadas en la opinión y argumento de estas tres personas. Jorge Zúñiga, encabezado a los opositores frustrados, y Germán Alejo defendiendo ciegamente a Aduviri, en tanto que Luis Borda actúa como intermediario.
Los 16 consejeros restantes simplemente han afinado sus capacidades de ser “votos”, bultos, muy a su pesar.
Todo esto que digo puede comprobarse fácilmente en los videos de las sesiones del Consejo Regional, cuando el presidente manda a debate algún tema: los primeros en argumentar son Zúñiga y Alejo (de Puno y Huancané, respectivamente), mientras el resto sirve de remero o solo repite lo dicho por ambos previamente.
