Por: Alexandra Ramos
Las empresas de telefonía móvil, desde el 10 de diciembre, deberán detener la venta de chips en las vías públicas, ya que no prestan la seguridad necesaria y no garantizan que los usuarios tengan solo una línea móvil a su nombre, pudiendo ser víctimas de estafa.
En Puno, uno de los lugares con mayor afluencia de vendedores de chips es la intersección de los jirones Los Incas y Cahuide, donde se encuentran promotores de líneas móviles que ofrecen chips gratuitos con la premisa de que solo se necesita la huella dactilar y los nombres.
No obstante, al otorgar esta información, los usuarios estarían expuestos a que adulteren su identidad para vender más chips.
La jefa de Osiptel Puno, Eugenia Uria Lipa, precisó que se está afectando el derecho a la información como usuarios, además que contratan otros servicios móviles sin el consentimiento de la persona y la mala utilización de los datos personales.
“Si es que las empresas siguen vendiendo estos chips, serán amonestados desde el 0.05% de 1 UIT hasta las 350 UIT”, detalló.
En ese sentido, la especialista pidió a los usuarios que hayan comprado alguna vez un chip de la vía pública que tomen precauciones, como la verificación de las líneas telefónicas contratadas a su nombre.
Si bien no hay un límite para las contrataciones, sostuvo que se notifica a la persona mediante un mensaje de texto desde que se han registrado 10 chips a su nombre.