El responsable de Senamhi en Puno, Sixto Flores, pronosticó que las intensas lluvias están próximas a finalizar en la región altiplánica, dejando a los ríos con caudales recuperados y al lago Titicaca con un incremento de 34 cm respecto a fines del año 2023.
Detalló que existe un 90 % de probabilidades de que continúen las precipitaciones intensas hasta el 2 de marzo y un 70 % de que disminuyan entre el 3 y el 7 del mismo mes. Tras esto, se espera que se tengan las últimas lluvias de la temporada hasta el 15 de marzo.
Con esto, la mayoría de caudales de los ríos están al 100 % y unos pocos están en alerta amarilla, es decir, cerca del desborde. En el sur de la región, algunos están al 90 % de su caudal.
En tanto, el lago tuvo una elevación de 34 cm sobre su nivel desde fines del 2023, pese a lo cual está debajo de su nivel histórico en unos 30 cm. Es decir, las consecuencias de la sequía aún no se han reparado.
Según el jefe de la oficina de estadísticas de la Dirección Regional Agraria de Puno (DRAP), Germán Cutipa, la región Puno solo recuperará la producción de campañas anteriores en un 40 %, dejando una brecha de más del 10 %.
Eso sin contar las últimas afectaciones a los cultivos, principalmente por los desbordes de ríos y la falta de defensas ribereñas y lo que pueda pasar en la primera quincena de marzo.
Cabe recordar que, según estadísticas de la DRAP, en la campaña agrícola 2022-2023 la región experimentó una pérdida del 52.9 % de los sembríos, marcando así la peor crisis hídrica en los últimos 40 años.