Entre el llanto, familiares de Erika Cruz, la joven madre que fue hallada muerta en la víspera, realizan un plantón en la Plaza Mayor de Juliaca, exigiendo justicia y cárcel para su victimario.
Exhortando al ministerio de la Mujer, acusan a la pareja sentimental de Erika, Brayan Canaza, miembro de la Policía Nacional y según versiones de los familiares la última persona con quien la víctima se encontró antes de desaparecer 20 días atrás.
Erika Cruz dejó en la orfandad a un niños de año y medio.