En horas de la tarde de ayer miércoles 4 de diciembre, un grupo de trabajadores del cuestionado programa alimentario Qali Warma marchó en torno a su sede para asegurarle a los ciudadanos que no todos son corruptos.
Seguidamente señalaron a la Dirección Regional de Salud de Puno, como gran responsable de los casos de encubrimiento.