Escribe: Oscar Enrique Pino Ponce
Isaac Mita, un hirsuto enternado proveniente de las canteras del igualmente hirsuto partido que llevó al camarada Castillo y a su camarada Dina al poder, agitador social que en sus horas libres funge de “padre de la patria”, se atreve a achacar los problemas de la evidente violencia callejera urbana a toda escala, nada menos que a la prensa. A la usanza del método medieval, según el mono neuronal “padre de la patria” habría que exterminar a toda la prensa para evitar las malas noticias y de paso la escalada delincuencial.
Según el Sistema Informático Nacional de Defunciones (SINADEF), se contabilizó 2,011 homicidios al cierre del año pasado registrando un aumento de más del 100 % desde la pre pandemia, pero no, el negacionismo, consigna de las autoridades empuja al Ministro Santiváñez a pretender negar la siguiente estadística:
– el 90 % de los homicidios en Perú se comete con armas de fuego.
– el 31 % de los criminales usa motos lineales.
– el 54 % de los homicidios ocurre en la vía pública.
– el 95 % de los asesinados son hombres.
Siendo los delitos que más crecieron en el 2024, los de Extorsión con 19,432 casos y Sicariato, con 1,125.
Cuando le preguntamos a la ministra Desilú León durante su visita a Arequipa, sobre ¿cómo se podía promocionar el Perú con la afrenta, igual de terrorista, de los camioneros bloqueando semanas la Panamericana Sur? nos respondió que “se podía promocionar otras regiones del país”, Si repitiéramos la misma pregunta aludiendo a los 2 atentados de hace 2 días en Trujillo, con seguridad la evasiva ministerial sería reincidente, sin entender de que el destino Perú es un solo producto y que se requiere garantizar como un destino pacífico y seguro y avalar las recientes inversiones en infraestructura.
En fin, como habíamos manifestado anteriormente en éste mismo espacio, un simple “Travel Advisor” emitido por alguna oficina consular de los principales mercados compradores del producto Perú tocando tangencialmente los atentados terroristas al estilo de los 80. en Trujillo, será suficiente para traerse de narices al turismo receptivo.
Definitivamente la seguridad nacional, salud y trabajo de los peruanos y reactivación de sectores económicos claves (entre ellos el Turismo) no es la prioridad del Congreso, mucho menos del Ejecutivo, por eso hasta ahora no salen del entrampamiento de las normas sobre flagrancia delictiva. Mientras tanto el sector empresarial pareciera estar veraneando, su silencio cómplice es evidente y ya pasó de bronceado a chamuscado.