Por: Los Andes
La destitución del director del penal de Lurigancho, Víctor Santos Huapaya, marcó la respuesta inmediata del Instituto Nacional Penitenciario (INPE) tras la fuga de John Kennedy Javier Sebastián, un interno que el 21 de abril burló la seguridad durante el preencierro.
Javier, recluido desde 2023 por intento de asalto, cruzó el módulo 10, accedió a la “tierra de nadie”, escaló el muro perimétrico y escapó, gritando “¡Aleluya! Cristo vive”, según un video ciudadano.
La huida expuso graves fallos de vigilancia, llevando al relevo del personal de seguridad y a la remoción de Huapaya.
El INPE abrió una investigación administrativa y notificó al Ministerio Público para indagar responsabilidades penales. A pesar de los operativos policiales, el fugitivo sigue prófugo. El incidente, ocurrido a las 19:30, intensificó las críticas al sistema penitenciario.