Pese a que el exalcalde de Yarabamba, Manuel Aco Linares, ha admitido ser culpable de los delitos de colusión y cohecho activo genérico que el Ministerio Público le imputa, que dicho en otras palabras aceptó haber recibido dinero de un contratista y haber concertado para defraudar al Estado, la exautoridad podría volver a despachar desde julio, gracias a la lentitud con la que estarían operando sospechosamente las instancias judiciales.
Y es que, aunque parezca insólito, hasta la fecha, a más de un año de haberse destapado y probado toda una red de corrupción en el municipio de Yarabamba donde Aco fue sindicado como cabecilla de una organización criminal, la exautoridad en la actualidad no solo goza de libertad pese a ser un corrupto confeso, sino que la falta de una sentencia condenatoria lo podría reponer en el cargo.
Los Andes hizo un minucioso seguimiento de todo el proceso que se le sigue a Aco Linares y llama la atención la forma en la que se viene postergando la terminación anticipada del pro ceso contra la exautoridad, dejando la posibilidad de su retorno para volver a manejar el dinero del municipio de Yarabamba.
CRONOLOGÍA
Hay que recordar que en enero del 2024, Manuel Aco Linares, como alcalde de Yarabamba fue detenido junto con otros funcionarios por presuntamente entregar obras a concesionarios a cambio del pago del 10 % del costo de los proyectos.
El 19 de enero de 2024, el Sexto Juzgado de Investigación Preparatoria ordenó su detención preliminar, y el 8 de febrero del mismo año –ante las evidencias- se declaró fundado el pedido de prisión preventiva por 9 meses.
El 24 de octubre del mismo año, se expidió la Resolución N° 33-2024 por parte del Sexto Juzgado de Investigación Preparatoria en la que se declaró el vencimiento de la prisión preventiva en contra de Manuel Aco Linares y otros.
La Fiscalía representada en ese momento por Marita Cueva Ojeda, pese a que la prognosis de la pena inicialmente era de 13 años de prisión, no solicitó la ampliación de la prisión preventiva y se ordenó la inmediata libertad de los procesados. Sin embargo, para ese tiempo, Aco ya había admitido los delitos que se le imputaba y se trabajaba en el proceso de terminación anticipada.
En octubre del 2024, se dictó contra Aco y demás comparecencia con restricciones por nueve meses que vence en julio de este año, la que impide al exalcalde y el resto de implicados salir del país y ejercer cargo público por este mismo plazo; es decir que, a partir de julio Aco Linares no solo podría fugar del país, sino también volver a ser alcalde de Yarabamba. Esta realidad es una posibilidad gracias a que la exautoridad carece de una sentencia, por la cual el Concejo Municipal de Yarabamba tampoco lo puede vacar.
SIN SENTENCIA
Hay que recordar que, ante la confesión de Aco Linares sobre los delitos imputados en su contra, se inició con el proceso de terminación anticipada con el cual hasta ahora el Poder Judicial no emite sentencia. Este proceso inició el 25 de julio del año pasado, fecha desde la cual se han llevado ocho audiencias, entre algunas de las cuales el Poder Judicial resolvió desaprobar los acuerdos de terminación anticipada propuestos por el Ministerio Público, los imputados y sus abogados. En otras audiencias se ha reprogramado la realización de las mismas. Por ejemplo, llama la atención cómo el 21 de marzo de este año se suspendió la audiencia y fue reprogramada para el 14 de abril. Y la audiencia del 28 de abril ha sido reprogramada para este 22 de mayo.
SOSPECHOSO
Llama la atención, según el expediente N° 589-2024-33, ahora a cargo de José Luis Vilca Conde, juez de Investigación Preparatoria, como es que la Fiscalía y abogados de los investigados han convenido rebajar los 13 años y 8 meses de pena privativa de la libertad a 5 años de pena equivalente a 261 jornadas de prestación de servicios a la comunidad.