El embajador de Uruguay en Perú recibió, esta tarde, de manos del vicecanciller peruano toda la información referido al caso García la que será remitida a Uruguay para ser analizada y tomar una decisión sobre la solicitud de asilo solicitada por el expresidente, Alan García Pérez.
De acuerdo a un comunicado de la Cancillería peruana se precisa que el embajador Carlos Barro, se le entregó una Nota Diplomática sobre la solicitud de asilo diplomático presentada por el exmandatario.
«La Nota Diplomática recalca que en el Perú impera la democracia, el Estado de Derecho y la separación de poderes, así como la plena vigencia de los derechos humanos y libertades fundamentales», indica la Cancillería.
El documento puntualiza que en el Perú no existe persecución política de ningún tipo. Asimismo, precisa que el Poder Judicial y el Ministerio Público han actuado en el caso del expresidente García con respeto estricto al debido proceso y a todas las garantías de la administración de justicia.
La comunicación oficial peruana -entregada al diplomático uruguayo- resalta que el Compromiso de Lima “Gobernabilidad Democrática frente a la Corrupción”, adoptado por aclamación durante la Cumbre de las Américas celebrada en Lima en abril de 2018, recoge el compromiso de los países de América, entre ellos Uruguay y Perú, de adoptar las medidas necesarias para luchar contra la corrupción y de cooperar en esa tarea, habiéndose acordado de manera expresa respetar la autonomía de las instituciones que investigan posibles casos de corrupción.
La Nota Diplomática -refiere la Cancillería- también señala que Uruguay y el Perú son Estados parte de la Convención Interamericana contra la Corrupción de 1996, cuyo objetivo es precisamente fortalecer los mecanismos anticorrupción para defender a las instituciones democráticas de sus efectos corrosivos.
«La Nota Diplomática entregada ha sido acompañada de un documento explicativo elaborado por el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos», agregó.
A su salida de Torre Tagle, el embajador uruguayo dijo que su país se «tomará todo el tiempo que sea necesario» para tener una respuesta.