La falta de amor y cariño en un hogar disfuncional, arrastra a las adolescentes a caer en los brazos de la prostitución.
Otro de los factores es la falta de dinero, para que las menores acepten ejercer el oficio más antiguo del mundo. Muchas de ellas escaparon de sus casas y al verse en la necesidad optan por vender su cuerpo.
En ambos casos, las niñas fueron seducidas por un proxeneta con una cuenta falsa de la red social Facebook, que les ofreció empleo y ganar dinero de una forma fácil.
Los proxenetas y violadores aparentan ser una mujer o una persona de su misma edad. Pero detrás de ese nombre falso está un hombre que solo quiere aprovecharse de ellas, ultrajarlas, prostituirlas y ganar dinero a través de ellas.
Según el trabajo de investigación realizado por el Área Contra la Trata de Personas y Tráfico Ilícito de Migrantes (ARECTPTIM) del Depincri, los proxenetas primero enamoran a sus víctimas, tal como ocurrió en el caso de Fidel Suárez Quispe
También conocido como ‘Soli’, quien contactaba a sus víctimas por Facebook y al encontrarse en persona las enamoraba, estas niñas al sentir afecto y amor, que no recibían en sus casas, aceptaban todo lo que ‘Soli’ les pedía, como prostituirse.
Las menores entre 13 y 17 años, no son conscientes del delito que cometen contra ellas, se sienten enamoradas, piensan y creen que solo se trata de un juego.
El varón, ultrajó sexualmente a las niñas para enseñarles cómo deben tratar a los clientes. Este sujeto captaba a ocasionales clientes que solicitaban servicios sexuales por Facebook.
Negocio
La prostitución en menores, resulta ser un negocio rentable, los clientes ofrecían de 200 a 300 soles por las adolescentes. La ganancia se repartía entre el proxeneta y la menor.
‘Soli’ fue detenido la semana pasada, y estará recluido por 18 meses en el penal de Socabaya. La policía logró dar con su paradero, después de rescatar a dos menores que estaban desaparecidas.
Las víctimas indicaron que Soli era su proxeneta. Una menor de 15 años que vivía enamorada de él, terminó mal herida y acuchillada al negarse entregar el dinero de un servicio sexual.
‘Soli’ llamaba a las adolescentes cada vez que aparecía un nuevo cliente que solicitaba servicios sexuales, y él mismo llevaba a las menores con los parroquianos.
Las dos víctimas rescatadas indicaron a la policía que otras seis menores también eran explotadas de la misma forma.
El agresor es investigado por la Fiscalía Especializada contra el Crimen Organizado, ya que no operaría solo, y estaría en contacto con tratantes que prostituyen a menores en los sectores mineros.
La falta de control policial en zonas alejadas, es aprovechado por los proxenetas para trasladar a menores hasta los sectores de Secocha, Chala, Atico, Chaparra para trabajar en los llamados ‘prostibares’.
Recomendaciones
La policía recomienda a los padres de familia tener mucha comunicación con sus hijas adolescentes, para evitar que caigan en manos de tratantes de personas que solo quieren aprovecharse de ellas para prostituirlas y ganar dinero.
Asimismo, los progenitores deben estar alertas y vigilantes sobre el uso de redes sociales de sus hijos.
Los computadores no deben estar en sus habitaciones, deben estar en un área común, donde los padres pueden ver qué páginas web visitan sus hijas.
Las autoridades deben seguir trabajando para erradicar a los tratantes de niñas, ya que aún existen muchas personas y bandas de delincuentes que solo quieren ganar dinero prostituyendo a menores de edad.
La trata de personas en la modalidad de explotación sexual es el segundo delito más rentable después del narcotráfico.
