Pobladores y familiares piden apoyo a las autoridades para dar con la ubicación del cuerpo
Un pescador de 55 años de edad desapareció en las gélidas aguas del lago Titicaca, el pasado 1 de enero, entre las 19:00 y 20:00 horas, cuando se dirigía a una caseta especial para realizar trabajos de vigilancia.
Se trata de Eduardo Molinedo Layme, cuyos amigos y familiares, con el apoyo de la población local, organizaron la búsqueda del cuerpo en la parte del lago correspondiente a la jurisdicción del barrio Nueva Generación, en el centro poblado de Molino (Chucuito-Juli).
Según Justa Mollinedo Layme, su hermano ingresó en un bote al Titicaca con la intención de vigilar las jaulas de trucha instaladas en lugares específicos. Sin embargo, antes de llegar a la caseta donde tiene acondicionado un pequeño dormitorio, habría caído al agua, muriendo ahogado.
Cabe indicar que la embarcación que usaba fue hallada atado junto a las jaulas que cuidaría esa noche, lo que fortalece la hipótesis de que pereció en las profundidades del lago.
Ahora los pobladores piden apoyo a las autoridades para dar con el cadáver del varón que deja desamparados a 6 hijos y una hijastra en la comunidad de Vilcallami, del sector Chiviñuso.
La tarde de ayer, se divisó a unos 35 metros de profundidad un bulto que sería el cuerpo, pero no pudieron hacer nada, ya que para constatar de qué se trata es preciso contar con el apoyo de buzos.