En su última edición, la revista Hildebrandt en sus Trece citó a un alto funcionario del Ministerio de Vivienda, Construcción y Saneamiento, cuya identidad se mantiene en reserva, quien advirtió que los intereses del préstamo multimillonario otorgado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) ya han comenzado a acumularse.
Según la misma fuente, la licitación para el proyecto de mejora del servicio de agua potable y alcantarillado en Juliaca se convocará recién en mayo, y eso solo si todo marcha como debería, algo que, lamentablemente, casi nunca sucede.
MILLONES AL AGUA
De acuerdo con un informe del Ministerio de Economía y Finanzas, solo este año ya se dan por perdidos S/ 1,361,413. Si la obra no comienza antes de 2025, se perderán otros S/ 2,627,149.
Cabe señalar que el préstamo otorgado asciende a S/ 350 millones, los cuales, por el momento, permanecen en las cuentas de algún banco, mientras que la población de Juliaca sigue soñando con la mejora de sus servicios de agua potable y alcantarillado.
Además, cada año los intereses del préstamo se incrementan, de manera que para 2026 se habrán pagado casi S/ 6 millones y para 2027 cerca de S/ 10 millones. En total, hasta el año 2038, los peruanos habrán pagado la suma de S/ 495,747,039.
TODOS GANAN, MENOS TÚ
Todo esto ocurre mientras el municipio y el gobierno central siguen gastando ingentes cantidades en estudios defectuosos y en saneamientos de terrenos que no generan resultados. Así, el “negocio” se reparte entre grandes banqueros, políticos que posan para la foto y empresas privadas que cobran por servicios que, muchas veces, no se realizan de manera adecuada.
Según Hildebrandt en sus Trece, el anuncio de grandes obras para Juliaca es una de las tantas “bombas de tiempo” dejadas por la exministra Hannia Pérez de Cuéllar. Esto coincide con la información previamente publicada por este matutino, que sostiene que la ministra engañó a los ciudadanos del altiplano, con la complicidad, voluntaria o involuntaria, de los alcaldes de Puno y Juliaca.
Se habló también de un expediente técnico para la ampliación del sistema de agua potable en Puno, pero esto resultó ser igualmente falso.
GRANDES NEGOCIOS
Lo único concreto es que, durante la gestión de la ministra, los costos para ambos proyectos se triplicaron, mientras que los expedientes técnicos permanecieron plagados de errores y negligencias, beneficiando así a constructoras privadas que cobran puntualmente, aunque la calidad de su trabajo sea pésima.
Cabe recordar que, hasta hace unas semanas, la ministra Hannia Pérez de Cuéllar era una de las figuras inamovibles del régimen de Dina Boluarte. Sin embargo, según información de la prensa nacional, esa confianza se rompió cuando un seguimiento policial comprobó que la exministra se reunía asiduamente con Alberto Otárola.
Antes de este quiebre, la ministra habría concretado grandes negocios con empresarios franceses, a quienes conoció durante su periodo como presidenta del Club de Negocios Peruano-Francés.
