Por: Flor Barrios Carbajal
En su primera semana en el cargo, Gilberto Gallegos Ramos, nuevo gerente regional de Salud de Arequipa, ha emitido un diagnóstico contundente sobre el estado del sistema sanitario en la región, calificándolo de “malo”. Esta evaluación se basa en la insatisfacción generalizada de los usuarios.
“Toda la insatisfacción de los usuarios así lo dicen yo no puedo decir que es regular porque nadie va a calificarlo así, nos van a calificar siempre como malo” afirmó. Cabe recordar que Gallegos asumió el cargo luego del viaje del anterior gerente de Salud en medio de problemas en el sector, como el desabastecimiento de medicamentos, infraestructura y equipamiento.
“Se recibe una gerencia con ciertas dificultades, que precisamente pasan por un poco de inacción, también por una gran necesidad de la población, situación que viene desde hace muchos años”, dijo.
Aunque rechazó la idea de que el sistema se encuentre en crisis total, enfatizó la necesidad de reorganizar la atención médica, destacando que muchos pacientes aún eligen ir directamente a hospitales, en lugar de acudir a centros de salud más cercanos. “Lo que está fallando es la organización interna.
No hemos sabido gestionar la demanda de atención”, subrayó. Gallegos destacó que, a pesar de las dificultades, se cuenta con un presupuesto asignado para el sector, el cual, según él, no se está utilizando de manera eficiente. “Hay un porcentaje que no se está ejecutando y hay muchas necesidades por cubrir”, declaró, refiriéndose al mantenimiento de hospitales y a la mejora de servicios.
