En dos años y medio de gestión, cuatro congresistas figuran como autores principales de menos de 10 proyectos y 12 tienen menos de 20 proyectos de ley, lo que quiere decir que vi ven en una suerte de “vacaciones de lujo” pagadas por todos los peruanos.
El colmo de la inactividad se representa en la legisladora Gladys Echaíz, con solo 3 proyectos de ley como autora principal. Ella proviene de las cante- ras de Renovación Popular y es la recordada fiscal suprema que libró a Alan García y a la “collera” del Apra de causas penales.
Wilmar Elera tiene cinco, pero dejó de ejercer, y Abel Reyes (Perú Libre) tiene 7; Luis Cordero y Tania Ramirez, quienes ingresaron por Fuerza Popular, tienen 10 y 11 proyectos, espectivamente.
Como miembro del club, el congresista puneño Óscar Zea tiene 27 proyectos de ley. Aunque no es tan escandaloso como sus colegas mencionados líneas arriba, su producción legislativa es magra si se considera que varios de sus similares superan, de lejos, el centenar.
Se debe aclarar que, en el registro del Congreso, los parlamentarios figuran como “autor principal”, “coautor” y “adherente”.