Por Roger Tahua Delgado
La conmemoración y celebración del Día del Trabajador es un evento mundial. Celebramos al generador de riquezas. Conmemoramos a todos aquellos por los cuales somos beneficiarios de algunas sobrevivientes conquistas laborales. Celebramos la fecha y no el hecho de tener trabajo.
Siempre se ha hablado de las condiciones de trabajo. Desde que el hombre recibe una remuneración a cambio de su fuerza de trabajo, ha estado en discusión bajo qué condiciones está desarrollando su labor. Cuántas horas se debe trabajar. Qué salario se debe recibir. Hasta dónde debería estar permitido que una persona desarrolle una actividad.
No es dable que uno tenga horario de entrada, pero no de salida. Si me van a calificar por metas cumplidas, si quiero llegar a ser un buen colaborador (ya no trabajador), entonces debo tomar el tiempo que debería dedicar a actividades propias de todo ser humano.
O también, para ser competitivo, después de realizar mi obligación, debo llevar mi trabajo a casa, porque eso es parte de tu responsabilidad. La identificación con la empresa o institución es lo que se va a medir en esta ocasión, y no se quiere a alguien que no se identifique, que no ame su empresa.
No existen ahora los famosos aumentos de sueldo. Si se quiere obtener mejor paga, entonces la clave es una palabra muy manida hoy: meritocracia. Que sirve para decirte que si quieres ganar más, entonces tienes que dedicar más horas, más esfuerzo y más dedicación a tu labor. Así es como se logra que tus ingresos aumenten. Dando más y más de ti.
Y, entonces, solo para recordar, las gratificaciones de Fiestas Patrias, de Navidad, bonificaciones de todo tipo, la CTS, pago por escolaridad, etc. han sido obtenidas en nombre de los derechos de los trabajadores. En muchos casos, derechos ganados después de largas y sacrificadas luchas encabezadas por hombres y mujeres.
Celebrar sí, pero no como un ejercicio más de consumismo, sino como una conmemoración de hombres y mujeres que a lo largo de la historia han entregado y entregan su vida a una labor diaria. Que han pasado su vida brindando un servicio o produciendo.
¡¡¡FELIZ DÍA DEL TRABAJADOR!!!
