Un lobo con piel de cordero. Es una definición que le calza como “anillo al dedo”, a Guido Bellido Ugarte ‘Puka’, congresista por la región Cusco. Su discurso que reivindica a los sectores más olvidados contrasta con su accionar dentro del Congreso de la República.
El actual parlamentario, en las filas de Podemos Perú, socio de uno de los más connotados saltimbanquis de la política peruana, José Luna, ha tenido – como suele ocurrir – actitudes que lo ponen en el paredón mediático.
QUÉ TAL RAZA
El pasado 6 de junio, durante el pleno para votar la Ley de Amnistía para las FF.AA. y Policía, que finalmente fue promulgada el pasado 13 de agosto, ‘Puka’ no votó, a pesar de haber estado presente. A continuación se hizo el desentendido y simplemente guardó silencio. Tal cual lo confirma el portal Voto Escondido, en la siguiente votación Bellido ¡sí votó! Vamos más atrás.
El 7 de noviembre de 2024, durante el pleno del Congreso para otorgar facilidades a una comisión investigadora por el caso “Cofre” de Dina Boluarte, Bellido también guardó silencio y no votó. El resultado: no se alcanzaron los votos necesarios y la Presidenta de la República fe blindada otra vez por el Parlamento.
“En este caso de la Ley de Amnistía el silencio de Bellido pesa más. En Cusco, su región electoral, ocurrió por ejemplo la masacre de Chumbivilcas (1990): 13 campesinos detenidos, torturados y ejecutados; algunos militares responsables ya tienen condena… empero, con esta ley podría quedar sin efecto.
RECHAZO TOTAL
Hace algunos días, se conoció la “invitación formal” a Bellido para candidatear al Senado en el 2026. La información desató la furia de miles en redes sociales que no dudaron en lapidarlo con calificativos demoledores: “traidor”, “tránsfuga”, “corrupto” y “zurdo sinvergüenza”.
El repudio no se quedó en lo virtual: Macario Velarde, dirigente de la Federación de Trabajadores del Cusco, llamó públicamente a la población a no votar por Bellido, acusándolo de ser parte de los parlamentarios que “convirtieron al Congreso en un prostíbulo”.
El rechazo es total y en su propia tierra su popularidad se derrumba como un castillo de naipes. Le re cuerdan su salto de Perú Libre a las filas de un partido con vínculos en los sectores más cuestionados de la política, un viraje que muchos catalogan de oportunismo puro.
El pueblo lo tiene claro: Bellido ya no representa la esperanza de nadie, solo sus propios intereses. Y mientras las redes lo siguen destrozando, su candidatura al Senado aparece como una burla más al Perú que clama por dignidad y transparencia.
¿Y EN PUNO?
Sin embargo, en la región Puno, “Puka” se las ingenia para ser recibido cada vez que programa viajes en la dizque semana de representación que es en realidad una puerta abierta para realizar proselitismo político con la plata de todos los peruanos.
En mayo de este año, por ejemplo, el parlamentario cusqueño, otrora premier del hoy expresidente Pedro Castillo, visitó la ciudad de Lampa y fue recibido por el alcalde de esta jurisdicción Heráclides Ojeda Huarilloclla y un grupo de pobladores.
La justificación, “destrabar” proyectos. Como dicen por ahí, Guido Bellido ya no tiene ni el cabello rojo. “Nuestro actuar siempre va a ser el correcto… no está bien que utilicen información falsa, para denigrar mi imagen o para confundir a la gente”, salió a decir, orondo.
La Ciudad Rosada no es la única ciudad que ha visitado ‘Puka’ en la región Puno. A lo largo de su labor como parlamentario son varios lugares en los que se le ha visto participar, sobre todo en fechas conmemorativas.
En mayo del año pasado estuvo en Juliaca y prometió dialogar con autoridades del Ministerio de Transportes y Comunicaciones para plantear la reubicación del aeropuerto Inca Manco Cápac. Llama la atención que, a pesar de estas grandes contradicciones, en la región nadie le haya puesto el “pare”.