En la víspera, un grupo de funcionarios del gobierno regional vivieron momentos tensos con un grupo de trabajadores administrativos de la Dirección Regional por la eventual demolición de las instalaciones actuales para construir el futuro hospital regional.
OFENDIDOS
Aunque luego se retractó de la amenaza de “botarlos a patadas” de parte del gobernador regional, fue usado como argumento por los trabajadores administrativos para negarse a irse del lugar. A esto se suma que, en concreto no hay convenio o acuerdo formal para que ellos se trasladen a instalaciones de la UNA Puno, tal como reconoció, a regañadientes el gerente regional, Óscar Macedo.
FALSEDAD
En marzo el gobernador regional dijo textualmente que se proyectaba construir un hospital de nivel III-1 pero, el mismo gerente tuvo que reconocer que, en realidad el hospital tiene el nivel II- 2. Esto último es aprovechado por los administrativos quienes indican que lo que se debe construir es uno de nivel III-1 donde se atiendan casos graves que, actualmente son derivados a la ciudad de Arequipa.
En suma, sostienen que no vale la pena trasladar el laboratorio, la cadena de frío y otras instalaciones para construir un nosocomio del mismo nivel que el actual. PRISA De fondo está la prisa para consumar actos de la empresa EGIS ante un eventual cambio de gobierno. Los tratos entre el actual gobierno (continuación del de Boluarte), no son nada transparentes y, corren el peligro de revisarse.
