La semilla de la chía (Salvia Hispánica), destaca por su riqueza en fibra soluble y en ácidos grasos (omega-3), dos nutrientes estrella llenos de efectos beneficiosos que escasean en la alimentación tópica moderna. Además, aporta una buena proporción de proteína, minerales y vitaminas.
Fibra soluble
Al hidratarse, la chía absorbe hasta diez veces su peso en agua, liberando un mucílago o gel formado por fibra soluble. Ese tipo de fibra reduce la absorción del azúcar y del colesterol, además de reducir el apetito.
INGREDIENTES
Para 4 porciones de 250 ml
– 4 cucharadas de semillas de chía (12 gr c/u)
– 6 cucharadas de jugo de limón ( aprox. el jugo de 2 limones medianos)
– 4 tazas de agua (250 ml c/u)
PREPARACIÓN
– Poner la semilla de chia a remojo en una taza de agua durante unos 30 minutos hasta que se libere su fibra soluble de aspecto gelatinoso.
– Colocar esta agua con las semillas en una licuadora (batidora) y triturar hasta obtener una pasta.
– Añadir el resto de agua y el limón y remover para que se mezcle bien.
– Añadir de 12 a 16 gotas de extracto líquido de estevia. (no calórico)
PROPIEDADES
– Adelgazante
– Saciante
– Baja de colesterol
– Antidiabética
– Laxante
– Nutritiva
Vegetariana :Total
Sin gluten:Apta para celíacos
Diabetes:Recomendado
Alergia alimentaria:Sin precauciones especiales
Poder antioxidante:276 unidades ORAC ( 6% del valor óptimo diario)