Escribe: Héctor Tintaya Feria
Ahora nuevamente se está poniendo en debate el control del transporte público y privado en el centro histórico de Arequipa. Cómo ya sucedió antes con los alcaldes, la gestión de Victor Hugo Rivera (VHR) ha dicho que aumentará el “pla- queo” en semana y que los taxistas y demás pueden estar olvidándose de la promesa electoral de eliminar no sólo este sistema de restricción de vehículos por días y horarios sino también la luna de miel que estaban viviendo con esto de de- jar hacer, dejar pasar, cómo se puede definir a lo que sucede con el transporte en Arequipa.
Aunque la gestión de VHR ha mostrado una inoperancia en todo sentido y en todo campo, la única situación que podría salvarlo de pasar cómo uno de los tantos alcaldes inadvertidos e ineficientes sino corruptos que hemos tenido, es en realidad y quién creyera faltando a su palabra que empeñó a los taxistas y transporte público en general cuándo era candidato.
Recordemos que para llegar a ser autoridad electa se vale mentir en nuestro sistema electoral. Y fruto de estas circunstancias VHR llegó exponiendo promesas como eliminar el plaqueo, las multas y sanciones a los taxistas y ahora, con el golpe de la realidad que significa tener un centro histórico atocigado e imposible, lanza esta propuesta de incrementar las restricciones de circulación en el cercado, no sólo con el plaqueo sino con la peatonalizacion de mayores vías. En realidad es una decisión práctica e inexorable en Arequipa.
Al notar que el SIT es un caso imposible si es que no hay pantalones legales desde la alcaldía se lanza con estas propuestas que colisionan con sus promesas, pero que sin em- bargo son atinadas y que, de concretarse podría ser lo único significativo que dejaría VHR a la ciudad. No hay duda que esta restricción incluso debería ampliarse a los vehículos pri- vados con sanciones efectivas. En algún momento esta va a ser la única salida a este incesante problema de incremento vehicular en Arequipa. No es que tampoco sea una iniciativa de esta gestión o las anteriores sino que es una respuesta in- evitable ante el caos.