Los Andes

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Los ciudadanos nativos de Moquegua ayer hicieron una emotiva movilización contra el Ministerio de la Presidencia; dentro de sus reclamos está el rechazo de la propuesta técnica definitiva del límite interregional con Puno, documento emitido por el Viceministerio de Gobernanza Territorial de la Presidencia de Consejo de Ministros, siendo el principal promotor de esta movilización el propio ejecutivo del Gobierno Regional Moquegua (los actos previos para esa movilización fueron realizados en el local del Estado). Para la autoridad regional moqueguana, el pronunciamiento del viceministerio es un gran revés, porque las zonas devueltas a la administración territorial de Puno son potencialmente explotables para la actividad extractiva minera y ahora mismo tienen nexos con los moqueguanos y no con Puno.

Según las autoridades moqueguanas, para las próximas horas se tiene previsto realizar un encuentro con las comunidades campesinas que convergen en el límite fronterizo de los tramos I y II, pretendiendo instaurar el caos y el desgobierno; el primer encuentro de fortalecimiento será en el Centro Poblado de Tolapalca, donde cumplirán una apoteósica acción cívica. Mientras que en el Gobierno Regional Puno, las autoridades solamente se limitan a hacer una conferencia de prensa donde dieron a conocer los alcances del pronunciamiento realizado por el Viceministerio de Gobernanza Territorial, Secretaría de Demarcación y Organización Territorial, no teniendo una clara identificación de la línea base que deben tener para reconquistar a la población que por astucia indigna de las autoridades moqueguanas hizo que cambien sus documentos de identidad a esa región.

Ahora la reacción de las autoridades puneñas debe ser con proyectos de inversión, uno de los ejemplos claros a tomar en cuenta es el Proyecto Cordillera, que con algunas modificaciones pueden ser viables, organizar el territorio con una perspectiva inclusiva e instaurar proyectos de mejoramiento de la calidad genética de animales que habitan en la zona, incrementar las áreas de pasturas y delinear la explotación adecuada de los sistemas hídricos, porque grandes extensiones de bofedales y ojos de agua se están secando paulatinamente, con ello llevan a la población a una migración penosa y, sin embargo, mediante sistemas sofisticados, esas aguas subterráneas son derivadas a los territorios moqueguanos y tacneños.