Los Andes

Según los relatos urbanos, cuando te roban un bien, de inmediato se debe acudir el domingo siguiente a la “cachina� ubicada en la salida a Cusco, pues es casi seguro que en ese lugar los delincuentes comercializarán el objeto robado. Eso es exactamente lo que hizo Willy Mamani Quispe (25), quien el viernes 26 de febrero sufrió el robo de su celular.

Al recorrer ayer casi toda la “cachina�, Willy Mamani se topó con un vendedor de celulares en el parque Los Kollas y de inmediato reconoció su celular, siendo entonces que preguntó por el precio y el vendedor le dijo que costaba 150 soles. Entonces, Willy de inmediato reclamó que le devuelva ese celular, que dos días antes le fue robado.

Tras el hallazgo, comenzó una trifulca entre Willy y el vendedor de celulares, identificado como Juan Gutiérrez Rodríguez, alias “El Chato�. Luego, un grupo de más de 50 pobladores no dudaron en golpear al comercializador, desnudarlo y obligarlo a que entregue el celular robado. Antes de ello, uno de sus amigos huyó con varios equipos móviles, incluido el de Willy.

Eran las 2 de la tarde aproximadamente, cuando llegaron miembros de Serenazgo Municipal y de la Policía Nacional, quienes intentaron calmar a la furibunda multitud que continuaba golpeando al presunto delincuente.

Fue en ese momento que el amigo de “El Chato� apareció en la zona, trayendo consigo el celular de Willy; sin embargo, ante un descuido policial, un ciudadano desconocido roció gasolina en la cabeza y parte del hombro del sujeto, al cual segundos después le prendió fuego.

El varón, ardiendo en llamas, corrió hasta un charco donde pudo apagar el fuego y, ante la zozobra desatada, pudo huir del lugar. En tanto, Juan Gutiérrez fue llevado a la dependencia policial para las investigaciones de ley.