Los Andes

A poco de emitirse el programa con su segunda participación televisiva en el programa “Yo Soy�, la talentosa Shanell Jordán nos contó un poco de su vida y sus logros.

Un día antes de impresionar a los jurados del programa concurso “Yo Soy�, Shanell Jordán no tenía la menor intención de hacerlo. Era noche y por cosas del destino, vio una convocatoria en la televisión. Estaba en Lima para participar de un evento muy distinto, no había preparado una imitación en especial, pero, fiel a su carácter, se decidió.

Al día siguiente, por la madrugada, fue a esperar su oportunidad, al igual que decenas de participantes. Por la mañana había impresionado a parte de la producción, a cargo de la preselección, y por la tarde, luego de obtener el visto bueno del jurado principal, ya era parte de uno de los concursos más exigentes de la televisión nacional.

¿Golpe de suerte? De ninguna manera. Shanell participó en decenas de concursos de canto desde niña. De su padre, Henry Jordán, heredó la pasión por el canto y, de parte de su madre, Eva Condori, la pasión por el deporte.

“En realidad siempre me ha gustado, empecé a cantar desde los 6 o 7 años canciones criollas, porque mi papá canta esas canciones�, cuenta. Su talento se demuestra en un solo hecho: jamás tuvo una clase de canto.

Ella escucha cuidadosamente las inflexiones de voz de sus artistas favoritas y, luego de captarlas, aplica lo aprendido. “He aprendido escuchando y practicando cada vez más�, explica.

A ella le encantan los retos y para salir airosa en su participación en “Yo Soy� tiene mucho por superar. Sus competidores son casi profesionales del canto y la imitación de la cantante Rihanna ya tuvo su oportunidad en ediciones anteriores.

Esto no la intimida en absoluto, así como tampoco se intimidó mientras esperaba su oportunidad para cantar. Con toda seguridad, su espíritu de competencia se ha forjado en los partidos de vóley, deporte que practica con seriedad desde los 11 años y que constituye su segunda pasión.

Esta segunda pasión la llevó a participar en la selección de Puno y la hizo visitar otros países. Su ambición era pertenecer a la selección nacional, pero en este deporte, como en el básquet, la talla es decisiva.

Ella es alta, mide 1.71 cm, pero para los estándares nacionales le falta cerca de 10 centímetros para igualar los más de 1.80 de �ngela Leyva, por ejemplo. Los equipos de sus amores son Santa Rosa, el colegio en el que estudió, y la selección de Puno, donde dio lo mejor de sí. Actualmente alterna sus pasiones con el estudio superior, pues está en la escuela profesional de Ingeniería Económica de la UNAP.

No se puede dejar de mencionar que, a sus 19 años, Shanell es muy bella, lo que la llevó a representar, por si fuera poco, al conjunto de la Diablada Bellavista en el concurso de Reina del Folklore 2014.

Ella piensa en el futuro, pero no tanto. Sueña con ser solista y cantar rock, pop, o baladas, y darse a conocer al nivel internacional. Quiere cantar y tomar las oportunidades que se le presenten sin adelantarse.

“Lo primero es agradecer a dios por darme este don y agradecer que tenga unos padres maravillosos; gracias a ellos pude alcanzar muchas cosas, tanto en el deporte como en el canto�, finalizó.