“El escritor captura la esencia de ser peruano”

Fecha:

Julio Benavides publicó “Narciso y sus Musas” “Cultura y combi” y “Buscando a venus”

Julio César Benavides Parra nace el 20 de marzo de 1977, en Jesús María (Lima). En el 2010, en la editora Paracaídas, dirige tres proyectos que se convierten en libro. Luego se vuelve editor y con 11 autores inicia la editorial “Vicio perpetuo, vicio perfecto”, con la cual viaja por la costa, sierra y selva del país y publica más de 100 títulos.

¿Qué libro trabaja usted ahora?

Estamos trabajando en dos proyectos, uno de poesía que sale la semana que viene, de Henry Alvitres, y una antología de cuentos que reúne a 34 autores. Este último libro tiene lo mejor de la narrativa nacional en lo que concierne a lo multiautoral-múltiples, voces narrativas en donde se circunscribe la costa, la sierra y la selva.

¿Podría darnos más detalles?

Es una colección que se inicia en abril del 2014, con la antología de poesía “Sinfonía Lírica” y sigue con la antología de cuentos “La nueva ola”, del 2015. Continúa con la antología de microcuentos “Toque corto” y con la antología de cuentos “Punto de encuentro”. Luego sigue la antología de poesía “Cónclave para el verso”, de 2018, así como la antología de cuentos “Andando en cuentos”. Le sigue la antología de poesía “Concierto Lírico” y la antología de microcuentos “La cuarentena”, de octubre del 2020. Finalmente está la antología de cuentos “La otra orilla”, de este mes.

¿No es el tiempo acaso de plantear un proyecto nacional?

Nuestros libros, en su mayoría, están dentro de un plan de identidad nacional que trata de rescatar las características del ser peruano; por ejemplo, sus costumbres, artesanía, sociedad, idioma, danzas, historia, gastronomía, geografía, vestimenta, clima, etc. Este planteamiento trata de convertir a nuestra esencia del ser peruano como rasgo inequívoco de nuestra nacionalidad y la literatura como el vehículo adecuado.

¿Cuál es el rol de los escritores?

El escritor es el principal vector de este cambio, es el artista que captura la esencia de ser peruano y lo lleva a todo el Perú, mediante sus libros. Es importante saber que la literatura, al ser escritura, puede capturar toda la esencialidad de lo peruano y llevarlo a cada rincón del país y llegar luego a todo el mundo, con el instrumento fundamental que es el libro; por eso, cuando hablan del Perú, se habla de César Vallejo y Mario Vargas Llosa. Eso logra la literatura.

¿Qué se entiende por reescribir la historia del Perú?

Bueno, la historia del Perú hasta el siglo XX ya está escrita, pero en lo que respecta en el siglo XXI se sigue escribiendo con los documentos de la actualidad, que son literatura y que capturan la potencialidad de lo que representa nuestro ser nacional. Nada está dicho en este siglo; cada poema, cuento, novela, obra de teatro y ensayo es el entramado de circunstancias que representan nuestra actualidad.

Según su criterio, ¿en qué medida la literatura contribuye a los cambios sociales?

La literatura es un elemento primordial de cambio. Tenemos la poesía de César Vallejo, en sus “Poemas humanos”; el mismo Manuel Scorza, con su poesía social, y el mismo José María Arguedas con sus novelas. Cada uno de ellos representan épocas distintas, pero son elementos de concientización para sus lectores y oyentes, que son depositarios de las sensaciones, sentimientos, reflexiones, que llevan mediante la cultura los grandes cambios sociales.

¿Qué nos puede decir de “Vicio perpetuo, vicio perfecto”?

Es una editorial que comenzó en un proyecto en otra editorial y que se hizo libro para unos autores; lo que se hizo como un encargo y un anhelado sueño, se convirtió en una realidad. “Vicio perpetuo, vicio perfecto” representa la unión de 11 amigos para sacar un libro; ese primer libro era “Sacra cofradía”, que luego se convierte en un sello independiente, en donde varios autores deciden publicar su producción.

Finalmente, ¿qué le aconsejaría a un joven escritor?

A todos los jóvenes escritores hay que pedirles leer mucho y que siempre sean constantes. Hay que recordar el ejemplo de Mario Vargas Llosa, que dedica ocho horas diarias a la escritura. La literatura pide entrega total y nada más sustancial que luchar contra la hoja en blanco; asimismo, vivir la vida intensamente, porque la literatura está hecha de la vida misma, porque eso nutre al arte de escribir. No olvidar detenerse en los detalles para recrear una escena tal cual sucede. Finalmente, tener mucha fe en su vocación de ser escritor.

Compartir post:

Suscríbete

Populares

Más vistos
Más vistos

Arequipa: observan proceso para supervisión en millonaria obra de la región

La Contraloría General de la República ha cuestionado el...

El secreto origen de la cultura Puquina

Puquina es uno de los distritos de la provincia...

Pulseras de lujo de Dina Boluarte

Según un informe del portal Mataperrea, Boluarte habría lucido...

Juez desestima nueva ley de crimen organizado

Por segunda vez, el juez Richard Concepción Carhuancho decidió...